Sigüenza fue, es y será fuente de inspiración para la literatura, la pintura, la música y demás artes. A lo largo de los siglos son numerosos los escritores que bien nacieron o pasaron por ella siendo el papel el testigo de su actividad literaria.
En el siglo XVI nació un historiador, poeta y teólogo llamado José Martínez de Espinosa, más conocido como Fray José de Sigüenza. Fue famoso literariamente por sus poemas y, sobre todo, por su Historia de la orden de San Jerónimo en la que puede leerse una extensa descripción del Monasterio de El Escorial.
En el siglo XVII en el segundo tomo del Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha más conocido como el Quijote de Avellaneda o Quijote Apócrifo aparece Sigüenza reflejada en una de sus aventuras.
Ya en los S. XIX y XX numerosos son los escritores, filósofos y periodistas que visitaron la ciudad y quedaron fascinados al contemplar la catedral y su Doncel; símbolo intelectual de la ciudad representada su escultura funeraria en posición de lectura, y del paseo junto al río llamado Alameda. Sus escritos aparecieron en artículos publicados en periódicos de la época como El Imparcial, en novelas como La nave de los locos de Pío Baroja y en poemas como el de Rafael Alberti dónde refleja la admiración que le produjo el Doncel y Sigüenza, pudiendo ser leído en la estación de ferrocarril de la ciudad en un mural cerámico creado por los artesanos de Pozancos de Alfar del Monte.
El filósofo José Ortega y Gasset veraneó varias veces con su mujer Rosa Spottorno y con los padres de ambos. Los Ortega habían formado una tertulia política y literaria a la cuál acudían personajes de la sociedad seguntina, como el Conde de Romanones.
El poeta y escritor Gerardo Diego publicó un suplemento de la revista Carmen llamado Lola en la imprenta seguntina Rodrigo junto con su amigo poeta soriano Bernabé Herrero, sumándose así la ciudad a la actividad literaria de la Generación del 27.
Un premio nobel como Camilo José Cela que escribió Viaje a La Alcarria, disfrutó de Sigüenza junto con sus amigos también escritores María Antonia Velasco y Francisco Marquina.
Patrimonio literario, periodístico, filosófico y político de personajes que dejaron un legado para la historia universal.
Inés García Gutiérrez
Librería Rayuela