La colección está formada por dieciséis tapices, pertenecientes a dos series: Historia de Rómulo y Remo y las Alegorías de Palas Atenea. Tejidos en Bruselas a mediados del siglo XVII en dos de las manufacturas más importantes de la ciudad: la de los Eggermans y los Le Clerc, fueron donados a la catedral por el obispo Andrés Bravo de Salamanca en el año 1664.
Los dieciséis tapices que forman esta colección son piezas excepcionales no solo por su valor artístico sino también `por la temática de una de las series, a la que he denominado Alegorías de Palas Atenea cuando la estudié por vez primera en el 2004. Es una serie única, de la que no conocemos otras ediciones.
En los ocho tapices se muestra alegóricamente las virtudes que la mitología clásica atribuye a esta diosa y que son una lección de actitud cívica. Palas Atenea es el modelo del buen gobernante, que evita las guerras y busca la paz que traerá prosperidad para su pueblo, el desarrollo del comercio, de las artes, todo lo cual se consigue a través de la unión de las voluntades y del esfuerzo.
El autor de los modelos, posiblemente un seguidor del gran pintor francés Charles Poerson (+1667), se ha inspirado en obras como la de la Educación de un príncipe cristiano de Erasmo de Rotterdam, obra que influyó en la literatura posterior denominada “espejo de príncipes”, y en el toledano Pedro de Ribadeneyra (1527-1611) , que escribe un tratado para la educación del rey Felipe III sobre las virtudes que debe tener el príncipe cristiano para gobernar y conservar sus estados. Para las alegorías se ha inspirado en la conocida obra de Cesare Ripa, Iconología publicada a finales del s. XVI.
Margarita García Calvo
Doctora en Historia del Arte