UN SUEÑO POSIBLE
En 1965 Sigüenza fue declarada Conjunto Histórico Artístico, valorándose no solo sus más de dos mil años de existencia como ciudad, sino también las huellas que esos siglos de historia habían dejado en ella desde el punto de vista del patrimonio arquitectónico: una catedral, un castillo, dos templos románicos, más de una centena de casas medievales, varias casonas y diversos edificios municipales. Y además, una decena de iglesias, ermitas y conventos renacentistas, barrocos y neoclásicos, varios hospitales, un hospicio y una universidad.
Una ciudad que es en sí misma y en sus edificios monumentales es un gran libro de arte, como evidencia, por ejemplo, la propia catedral, que acaba de celebrar en el 2019 los 850 años de su consagración con un año jubilar. En ella podemos estudiar todos los estilos artísticos desde el románico al neoclásico, y sobre todo admirar una joya, que por sí misma, podría ser el motivo por el que nuestra ciudad fuese declarada Patrimonio de la Humanidad, la escultura funeraria gótica de Martín Vázquez de Arce, El Doncel. No en vano los seguntinos de 1965 eligieron como nombre geo turístico de Sigüenza el de “Ciudad del Doncel”.
Pero no solo por esta obra excepcional podría Sigüenza ser Patrimonio de la Humanidad, sino también por ser un libro abierto de urbanismo. Recordemos que conserva gran parte de sus dos murallas medievales y de su recinto renacentista, y que en los pocos metros que distan entre su Alameda y su castillo se pueden estudiar las características del urbanismo medieval en sus Travesañas, del renacentista en la Plaza mayor, del barroco en la calle monumental donde se alzó su universidad, del ilustrado en el barrio de San Roque, del neoclásico en la citada Alameda y del contemporáneo en las nuevas urbanizaciones y barrios de chalet.
En segundo lugar, por su patrimonio inmaterial.
Sigüenza es una ciudad que celebra sus fiestas como las celebraban sus mayores, logrando en ellas una simbiosis perfecta entre lo popular y lo religioso, entre lo gastronómico y lo musical. Música, gastronomía, rituales, todos son ejemplos de patrimonio inmaterial y en nuestra ciudad están presentes a lo largo del año. Gastronómicamente hablando, quiero recordar a nuestras dos estrellas Michelin, los chefs de los restaurantes El Doncel y el Molino de Alcuneza, y a todos los restauradores que tienen a gala seguir las recetas de sus abuelas, de las guisanderas que les enseñaron a utilizar los productos de la tierra. Y musicalmente hablando, Sigüenza es la ciudad de las mil músicas. Una ciudad que en las últimas décadas no solo ha recuperado la dulzaina y sus bandas municipal y cofrade, sino que a lo largo del año ofrece festivales de todo tipo de música, de folk, de clásica, de dulzaina, de guitarra, de jazz, de flamenco, de rock, de charangas, etc. También, desde el punto de vista inmaterial, destacamos rituales como el Descendimiento de la Cruz en Viernes Santo, recuperado por la Cofradía de la Vera Cruz y del Santo Sepulcro después de 237 años; o el paso de los “armaos” que portan las imágenes de la Pasión en las procesiones de Semana Santa. Sin olvidarnos del trabajo de artesanos y artistas y de todos los que con su participación contribuyen a que las fiestas seguntinas sean inolvidables, tanto las Jornadas Medievales, en honor a la reina Doña Blanca de Borbón, que vivió en el castillo cuatro años confinada en el siglo XIV; como los Arcos de san Juan o las corridas de toros por se celebran por san Roque en la ciudad desde hace quinientos años.
Y en tercer lugar, por su patrimonio natural. Íntimamente unido al patrimonio cultural. No olvidemos que con la sal de las salinas de Imón se financió la construcción de nuestra catedral. Un patrimonio natural en el que se combina la naturaleza intervenida por el hombre, como ocurre en su Alameda, con la que nos ha regalado la geología, en el Barranco del Dulce, famoso por ser el marco donde el naturalista Félix Rodríguez de la Fuente filmó algunos de sus reportajes mas famosos.
Sigüenza sí, tiene por delante un larguísimo camino para lograr su sueño, pero cientos de razones para conseguirlo. Mientras llegamos a la meta os invitamos a visitar nuestra ciudad y a disfrutar de su patrimonio.
COMITÉ
El Ayuntamiento de Sigüenza, por unanimidad del Pleno celebrado el 27 de enero de 2020, aprobó la constitución de un Consejo Rector, con motivo de la Candidatura de la Declaración de la Ciudad de Sigüenza como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El Consejo tiene carácter consultivo y deliberante con funciones de información y asesoría.
En aquel mismo momento, e igualmente con el voto a favor de todos los miembros que conforman el Pleno, se acordó nombrar presidente de este Consejo Rector a Antonio Fernández-Galiano Campos, persona de destacado prestigio para liderar este proceso y con capacidad de consenso. Su labor será determinante en la consecución del objetivo marcado, junto con la del resto de miembros de dicho órgano y los intervinientes y participantes de las distintas organizaciones, asociaciones, fundaciones y demás colectivos.
Pilar Martínez Taboada
Cronista Oficial de Sigüenza